Frase repetida continuamente entre los jóvenes de la sociedad española, el motivo está bien claro, la mayoría no abandonan el hogar hasta los 27 años por termino medio, y lo peor de todo es que esta cifra seguirá aumentando con el paso de los años si la situación económica del país no cambia.
Desde los años 80-90 hasta ahora ha disminuido el número de emancipados considerablemente, ya que en aquella época la mitad o más de la población entre 25-30 años ya estaba independizada de su padres, mientras que actualmente esa cifra no llega a un tercio. Lo peor de estos datos es que la mayor parte de los jóvenes, que actualmente tiene entre 21 y 24 años, se plantean muy seriamente su emancipación pero el problema para no dar el paso es la falta de empleo fijo para poder mantenerse.
Personalmente en un año aproximadamente acabare la carrera, y comenzará mi “vida laboral”. Hasta el día de hoy he estado viviendo en casa de mis padres mientras estudiaba en la universidad, a pesar de mi deseo de vivir sin padres, independiente; pero así es la vida del estudiante si no se dispone de dinero para poder emanciparse.
Mi problema continuará durante algunos años más, ya que la situación económica actual con tases de desempleo elevadísimas y un desempleo juvenil jamás alcanzado, harán que tengo que seguir formándome; hay pocas posibilidades de que encuentre un empleo recién licenciado y además que este sea fijo y haga aumentar mis expectativas a largo plazo, hasta el punto de emanciparme, así que fácilmente me tocara estar otros años por casa.
Lo complicado puede que sea encontrar empleo en la ciudad en la que vives, en este caso Granada. Siempre hay que intentar sobrepasar las barreras y mudarte a otra ciudad, bien en tu propio país o en el extranjero, echándole valor y ser capaz de coger el camino complicado, lejos de lo que quieres, para poder cumplir objetivos.
Esta generación de 20-25 años, es una generación que le esta tocando vivir momentos difíciles, pero que son lo suficientemente maduros y liberales para irse a otro país a buscarse la vida, como hicieron nuestros abuelos; emigrando a otro país para encontrar un empleo que les ayudase a mejorar económicamente y socialmente.
La paradoja de esta situación es que parece que no hemos evolucionado, que lo que hacán nuestros antecesores hace 50 años lo seguimos haciendo hoy en día. Así que algo esta fallando, cuando la gente se tiene que ir con sus esperanzas a otro país, ya que en el suyo no hay trabajo acorde con los estudios que han realizado.
Las principales causas de la no emancipación son el aumento del tiempo de la formación estudiantil, debido a las pocas esperanzas que tienen los estudiantes cuando acabas tus estudios y sabes que no vas a encontrar un trabajo fácilmente, por lo que decides seguir estudiando y formarte lo máximo que puedas para tener mas posibilidades de éxito. Lo más llamativo en que mucha gente reduce el curriculum para encontrar trabajo mas fácilmente, en puestos por debajo del nivel de formación que tienen esas personas, esto tiene sus consecuencias negativas, como por ejemplo, el nivel de satisfacción no será el suficiente como para que desempeñe el trabajo con motivación y ganas de evolucionar; sin embargo son medidas muy drásticas para seguir adelante en tiempos de crisis.
Todo esto esta teniendo multitud de consecuencias, como que los jóvenes tardamos tanto tiempo en salir de casa, tenemos la incertidumbre de cómo será su vida tras finalizar sus estudios, además de retraso en la madurez mental y acostumbrarse a tenerlo todo, se podría decir que se tarda mas en pasar de joven a adulto, con nuestra edad nuestros padres ya estaban casados, trabajando y comenzando a formar su propia familia, mientras nosotros seguimos en casa. Además esta situación supone un problema para los padres que tienen que seguir más años manteniendo a sus hijos, con el coste económico que esto supone para ellos
Realmente es un problema grave en nuestra sociedad tanto para padres como para hijos, los primeros por que ya están bastantes años trabajan en la educación de sus hijos como para también tener que mantenerlos ahora cuando son mayores, y para los hijos por la impotencia de verse con casi 30 años y teniendo que vivir en casa de los padres sin apenas intimidad. Lo peor de todo es que, por ahora, esto no tiene vistas de ir en mejoría, la situación esta bastante complicada. Solo con un gran esfuerzo de todos, desde el gobierno hasta cualquier persona de la calle, se conseguirá que la situación en nuestra economía mejore, y por tanto, que nuestros hijos el día de mañana no tengan que estar hasta los 40 años en casa.
Referencias:
No hay comentarios:
Publicar un comentario